En julio, Guayaquil registró un total de 126.101 toneladas de desechos recolectados, resultado del trabajo coordinado entre la Dirección de Aseo Cantonal y Servicios Especiales (DACSE) y la empresa encargada del servicio de limpieza y recolección de residuos. Con rutas programadas y horarios establecidos, esta labor contribuye al orden, la salubridad y la calidad del entorno urbano.
Sin embargo, el esfuerzo institucional no basta si no va acompañado del compromiso ciudadano. A pesar de las campañas y los canales de denuncia activos, muchas personas siguen sacando la basura fuera del horario permitido, lo que deteriora el entorno, genera focos de insalubridad y afecta la imagen de la urbe. El mes pasado, se recibieron 506 alertas ciudadanas al número 181 por mala disposición de desechos.
Esta falta de corresponsabilidad se traduce en controles. En promedio, cada 90 minutos una persona es notificada por incumplir la normativa. En julio, DACSE emitió 536 notificaciones. La ordenanza vigente contempla multas que van desde USD 92 hasta USD 575, según la gravedad de la infracción.
Mantener limpia la ciudad no depende únicamente del servicio municipal. Desde la Alcaldía se insiste en que este es un esfuerzo compartido que requiere conciencia, disciplina y voluntad. Una Guayaquil ordenada y saludable es posible si cada ciudadano asume su parte con responsabilidad.